¡Usted puede entender la Biblia!

Una de las razones que las personas dan para no investigar la Biblia es que su mensaje no se puede entender. Algunos líderes religiosos van tan lejos como para afirmar que no puede ser interpretada correctamente por el hombre común o por “el laico” sin la “tradición de la iglesia”. Por consiguiente, muchos tienen la falsa impresión de que la Biblia es simplemente “demasiado confusa” y nunca hacen un esfuerzo serio para conocer sus enseñanzas.

Sin embargo, como el apóstol Pablo escribe a los cristianos en Corinto, Grecia, “Dios no es Dios de confusión, sino de paz” (1 Corintios 14:33). No ha comunicado su voluntad a la humanidad de manera ininteligible, sino mediante el testimonio coherente y escrito de testigos oculares (1 Juan 1:1-4), algunos de los cuales fueron torturados y asesinados, creyendo plenamente que Jesucristo fue crucificado, enterrado y que había resucitado de entre los muertos tres días después.

La puede entender por leerla

Como uno de estos testigos oculares, Pablo dijo a los cristianos en Éfeso: “…habéis oído de la administración de la gracia de Dios … como antes lo he escrito brevemente,
leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo” (Efesios 3:2-4). Las cartas de los apóstoles y otros escritores inspirados del primer siglo se leían públicamente (Colosenses 4:16; 1 Tesalonicenses 5:27). Estas cartas ahora comprenden los veintisiete “libros” de nuestro Nuevo Testamento. Dios no sólo desea que todos entiendan la Biblia (Colosenses 1:9; 2:2), sino que también nos manda a que la entendamos (Efesios 5:17).

puede conocer la verdad

Jesús dijo: “El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi propia cuenta” (Juan 7:17). Un poco más tarde en el mismo evangelio, Jesús dijo a los judíos que habían creído en él: “Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8:31-32).

No necesita ser teólogo

Aunque algunos pasajes en la Biblia pueden ser desafiantes (2 Pedro 3:16), en general es comprensible. No fue escrito para la élite intelectual ni para la gente con un nivel muy alto de estudios. Marcos 12:37 indica que la gente común escuchaba a Jesús con agrado. Los apóstoles del Señor no eran teólogos, sino que más bien fueron considerados como personas “sin estudios ni preparación” por los líderes religiosos de su época (Hechos 4:13, NVI).

Como un rompecabezas

Tratar de entender la Biblia podría compararse con armar un rompecabezas. Usted comienza por intentar hacerse una idea del cuadro completo. El mensaje del Antiguo Testamento es “Alguien viene” y en el Nuevo Pacto el tema principal es “Alguien ha venido y vendrá otra vez”. Estas ideas pueden condensarse aún más en una sola palabra para resumir el mensaje de toda la Biblia: ¡JESÚS! Una vez que usted entiende el panorama completo de este “rompecabezas”, se vuelve más fácil entender cómo encajan las piezas individuales para crear la obra de arte más grande que la humanidad haya conocido.

Una estrategia para la lectura

Si usted es nuevo en el estudio de la Biblia, aquí tiene algunas sugerencias: (1) Comience a leer en el Nuevo Testamento. Puede comenzar con el evangelio de Lucas, seguido del libro de Hechos. (2) Anote las preguntas a medida que se le ocurran, sin atascarse en los detalles. (3) Pídale a Dios que le ayude a comprender lo que ha leído y comparta sus preguntas con otras personas que tengan más conocimiento de las Escrituras. Por supuesto, también puede enviarnos sus preguntas e intentaremos responderlas, si el tiempo lo permite.

La Biblia, como cualquier tema, puede ser difícil para quienes no están familiarizados con ella, pero con paciencia y orientación (Hechos 8:30-31), ¡descubrirá tesoros asombrosos!

–Jerry Falk